A solo 40 minutos de Tepic, se encuentra un rincón donde el tiempo parece flotar: Santa María del Oro. Este destino no solo es uno de los secretos mejor guardados de Nayarit, sino también una invitación a reconectar con lo esencial: la calma, la belleza natural y ese asombro olvidado de descubrir lo extraordinario.
Llegar hasta aquí es como ponerle “mute” al caos de la ciudad. Las curvas de la autopista se deslizan entre montañas suaves y vegetación vibrante, y cada kilómetro te va soltando el estrés hasta que solo quedan aire limpio, cielos amplios y un corazón listo para dejarse sorprender.
Santa María no se visita: se respira, se siente y se vive con todos los sentidos. Sus paisajes parecen pintados por la naturaleza en su mejor momento y su energía tranquila te atrapa desde el primer momento. Aquí, la belleza no necesita adornos; se manifiesta en lo simple: en una caminata sin prisa, en el reflejo del agua o en el canto de los pájaros que saludan a los viajeros.
Es el lugar ideal para mirar lento, comer rico, vivir profundo y regresar al presente.

joaofranca.arte_ – Instagram – Foto
El Borrego — Santa María del Oro
Antes de entrar de lleno a Santa María del Oro, hay una parada que se convierte en un ritual: El Borrego. Este restaurante de camino es famoso por algo más que su comida —es un abrazo en forma de desayuno. Aquí se celebra la birria recién servida, la tatemada de cerdo cocida con leña y las tortillas hechas a mano, tan suaves que parecen tejidas por el fuego.
El sabor es ahumado, honesto, lleno de historia. Comer en El Borrego es como regresar a las raíces, a esas cocinas de abuelas que sabían que el verdadero sazón viene del tiempo, el humo y el cariño.
Si vas, procura llegar antes de las 9 a.m., porque la fama del lugar ya cruzó fronteras y la fila puede ser larga. Pero si toca esperar, vale cada minuto.
Además de su menú delicioso, el sitio conserva un aire rústico y cálido. Puedes acompañar tu comida con café de olla, jugo natural y la vista del campo que empieza a despertar. Es el punto perfecto para cargar energía antes de adentrarte en la magia de Santa María.


Abraham G – Tripadvisor – Fotos

Fachadas inolvidables
Santa María del Oro no solo presume una laguna de ensueño, también guarda la esencia de un pueblo que vive a su propio ritmo. Sus calles tranquilas, casas de adobe, tejas rojas y tienditas con letreros pintados a mano, te transportan a un México que resiste el paso del tiempo con dignidad y ternura.
Aquí, cada esquina parece una postal viva: niños jugando en las banquetas, señoras platicando con calma y el sonido lejano de alguna canción ranchera. Al centro, el kiosko es el corazón de la comunidad; ahí se reúnen locales y visitantes cada tarde para disfrutar de los tradicionales helados de garrafa mientras el sol pinta el cielo de dorado.
No dejes de visitar la iglesia de Santa María, una joya arquitectónica del siglo XIX con fachada amarilla y detalles en cantera rosa. Es un lugar lleno de historia, perfecto para sentarse en silencio y admirar.
Y si te gusta explorar, encontrarás tienditas con café local, artesanías, y hasta pequeños restaurantes con platillos caseros que no aparecen en ningún mapa. Santa María del Oro no grita: susurra. Y quien se queda, escucha.

averagejoepix – Instagram – Foto

periodicovictoria – Instagram – Fotos

La laguna que cambia de color — Santa María del Oro
Encajada en el corazón de un cráter volcánico extinto, la laguna de Santa María del Oro es la gran protagonista de esta historia. Sus aguas cambian de color como si respiraran con el cielo: a veces verde esmeralda, otras azul cobalto o turquesa radiante. Este espectáculo no es casualidad: en su interior viven microorganismos únicos que, combinados con la luz y el clima, tiñen el agua como una obra de arte viva.
Aquí, no solo se viene a mirar: se viene a sentir. Puedes nadar, remar en kayak o hacer paddle board con instructores locales que conocen cada rincón secreto del lago. Samao Adventures es una de las operadoras que te lleva más allá del típico paseo, ofreciéndote rutas en lancha hacia miradores escondidos, historias contadas por lugareños y momentos que se sienten íntimos, mágicos.
La laguna invita al silencio. No hay ruido, solo viento y agua. Y si decides quedarte quieto unos minutos, verás cómo el paisaje comienza a hablarte. Es un lugar donde los pensamientos se aclaran y el corazón se expande. Donde mirar el reflejo del cielo es, también, encontrarse a uno mismo.

yemayaclub – Instagram – Foto

gente_nayarit – Instagram – Foto

smariaresort – Instagram – Foto
¿Qué comer?
Santa María del Oro se saborea. Y lo hace desde la raíz, con ingredientes frescos, preparaciones caseras y ese sazón que solo nace en cocinas donde se cocina con historia.
Uno de los imperdibles es El Desagüe, un restaurante rústico junto a la laguna donde el protagonista es el chicharrón de pescado: dorado, jugoso y servido con tortillas recién hechas a mano, guacamole y salsas que te hacen cerrar los ojos con cada bocado. Comer aquí es como sentarse en casa de alguien que quiere consentirte.
Pero el recorrido gastronómico no termina ahí. En el otro extremo de la laguna, se encuentra Nace del Mar, un restaurante con una de las mejores vistas del atardecer. Su platillo estrella, “4 Mares”, mezcla generosa de mariscos frescos al estilo nayarita, llega justo cuando el cielo se enciende en tonos violeta, rosa y dorado.
Ambos lugares son más que restaurantes: son experiencias sensoriales. Porque aquí se come con la vista, con el oído (gracias al canto de las aves y el murmullo del agua) y con el alma. Comer en Santa María es rendirse al placer lento y delicioso de lo auténtico.

elquijote_samao – Instagram – Foto

yemayaclub – Instagram – Foto

¿Dónde dormir? — Santa María del Oro
Santa María del Oro no solo se recorre de día. También se sueña de noche. Para quienes desean hospedarse con estilo, naturaleza y comodidad, hay dos opciones que brillan con luz propia.
Santa María Resort es una joya frente a la laguna. Desde $3,600 MXN por noche, ofrece habitaciones con balcones privados, alberca rodeada de árboles, desayunos incluidos y un restaurante con platillos locales. Aquí dormir es un acto de contemplación: despertar con el reflejo del agua y el canto de los pájaros no tiene precio.
Si buscas algo más íntimo y relajado, Yemayá Club & Villas es la opción perfecta. Desde $1,700 MXN por noche, este hotel boutique combina arte, naturaleza y atención personalizada. Algunas habitaciones cuentan con cocina, terraza y hamacas para ver el atardecer. Además, su restaurante ofrece ceviches, ensaladas frescas, tacos de marlín y jugos naturales.
Ambos hospedajes son más que una cama: son parte del destino. Aquí el descanso se transforma en experiencia, el silencio se agradece y las noches se llenan de estrellas. Porque en Santa María, hasta dormir es parte de la aventura.

smariaresort – Instagram – Foto
Para más acción: Arcadia Park
Si eres de los que buscan elevar el pulso y vivir la naturaleza desde otro ángulo, a solo 20 minutos del centro de Santa María del Oro encontrarás Arcadia Park Adventure, en Real de Acuitapilco. Este parque de aventura es pura energía: tirolesas que cruzan barrancos, puentes colgantes que se mecen entre árboles altos y descensos en rapel por cascadas naturales que refrescan el cuerpo y el alma.
Pero Arcadia no es solo adrenalina. También es conexión. Mientras avanzas entre senderos boscosos y resbalas por rocas cubiertas de musgo, sientes cómo la ciudad se queda lejos y lo salvaje despierta algo en ti.
Al terminar el recorrido, hay recompensa: un aguachile fresco y picosito, preparado con camarones de la región, acompañado de tostadas crujientes y una cerveza bien fría. Porque toda buena aventura merece un final delicioso.
Este lugar es ideal para quienes viajan con amigos, en pareja o incluso en familia. Hay actividades para todos los niveles, zonas de descanso y vistas espectaculares que justifican cada paso. Arcadia Park es la dosis perfecta de naturaleza, emoción y sabor. Un broche de oro para cerrar con fuerza la experiencia en Santa María del Oro.

valledelpicapedrero – Instagram – Foto
Si quieres conocer más de México lee nuestra revista mensual y suscríbete a nuestro canal de YouTube:
The post Santa María del Oro: descubre una laguna secreta que cambia de color appeared first on México Ruta Mágica.